Beatriz y Chari son grandes profesionales, dan un trato muy cercano, lo que es superesencial para sentirse bien. No solo nosotros estuvimos a gusto con ellas, sino también amigos y familiares, sabiendo animarles para sacar tomas, dando mucho juego el día de la boda. Además, gracias tanto a las fotos como al vídeo pudimos ver y apreciar esos detalles que ese día no captamos.
Con ellas realizamos la sesión de preboda y a pesar de no considerarnos fotogénicos supieron sacar ese lado nuestro, haciendo que la sesión sucediera sin más. A partir de ahí, decidimos contratar la postboda, sabiendo adaptarse a nuestros gustos.
Tres palabras para definirlas: profesionalidad, flexibilidad y cercanía. Las contrataremos de nuevo seguro.